Hoy hace 9 años del fallecimiento de Johan Cruyff, quien había sido una pieza clave en las últimas décadas de éxito del Barça. El 24 de marzo de 2016 falleció el holandés tras varios meses peleando contra un cáncer de pulmón que le había sido diagnosticado. Eso significó un duro golpe para toda la afición blaugrana que le tenía en gran estima. Pese a ello, los aficionados y el club le mantienen presente en sus corazones desde entonces.
La llegada de una estrella que lo cambaría todo
El 13 de agosto de 1973 siempre será recordado como el día que se llegó a un acuerdo por el fichaje que cambiaría la historia de un club y de todo el futbol como lo conocíamos. Aun así, «el Flaco» no pudo debutar con el Barça en partido oficial hasta el 28 de octubre de 1973 contra el Granada debido a diversos impedimentos que impuso la Liga. Aunque no sería la primera la vez, ya que su fichaje por el club catalán se podría haber dado mucho antes. La liga española se planteaba abrirse a la llegada de jugadores extranjeros para la temporada 1970-71 y el Barça fue el primero en moverse por el gran talento holandés. Cruyff era un jugador único y diferente que marcaba diferencias. Un adelantado a su tiempo que hizo historia ganando tres copas de Europa y tres balones de oro.
El Barça contactó con el jugador a través de Vic Buckingham, quien entonces era el entrenador culé y quien hizo debutar a Johan. El Barça logró llegar a un acuerdo con el Ajax en 1970, pero la liga española (casualmente) dio marcha atrás a permitir los fichajes de extranjeros. Fue entonces que el holandés renovó con el club de Ámsterdam.
Aun así, Johan declaró que si abandonaba el Ajax sería solamente para ir al Barça. Y no mintió. Posteriormente, cuando la liga permitió el fichaje de extranjeros, rechazó diversas ofertas, entre ellas una del Real Madrid. Finalmente, tras una gran presión ejercida por el jugador, se cerró un nuevo acuerdo y pudo llegar como prometió. Johan Cruyff ganó 1 Balón de Oro, 1 Liga y 1 Copa del Rey con la camiseta blaugrana, trayendo ilusión a un club que llevaba 14 años sin ganar la liga. Fue solo el inicio de una historia que estaba por empezar entre Johan Cruyff y el club blaugrana.
Un genio en los banquillos
Empezó entrenando al Ajax para posteriormente poner rumbo a Barcelona, como ya hizo como jugador. Su influencia ya fue enorme como jugador, pero como entrenador construyó un legado que fueron los cimientos de todos los futuros éxitos del club. El técnico holandés siempre buscó formar una propuesta donde se jugase bien, de forma directa y que fuera un espectáculo para el aficionado, es por ello por lo que se compara y se asemeja con el juego de Flick. A partir de esas bases llegaban las victorias, los títulos y los éxitos por si solos. Gracias a su juego cambió toda la forma pensar del club y la pelea por los títulos se convirtió en algo usual.
Durante su estancia en el Barça obtuvo 4 ligas seguidas, 3 Supercopas de España, 1 Copa del Rey, 1 Recopa de Europa, 1 Supercopa de Europa y la primera Copa de Europa de la historia del club, aunque no la última. Además, tras su marcha como entrenador siguió siendo participe en los triunfos. Su figura era extremadamente valorada durante el mandato de Laporta. Por ejemplo, Cruyff tuvo mucho peso en el nombramiento de Pep Guardiola como entrenador del primer equipo, quien acabó ganando el primer sextete de la historia en su primer año y se convirtió en el mejor entrenador de la historia de este deporte.
Son muchos los motivos por los que estar agradecido con Johan Cruyff. No se entenderían los éxitos del club ni los títulos que se han ganado en los últimos 25 años sin él. Tampoco se comprendería la admiración que despierta La Masía con jugadores como Lamine Yamal o Pau Cubarsí compitiendo como adultos pese a su edad. Ni mucho menos se asimilaría el juego que plantea y ejerce el Barça de Flick de no ser porque ya habíamos presenciado el Barça de Cruyff. Ni mucho menos la selección española habría ganado 1 Mundial y 2 Eurocopas de no ser por su influencia. Por eso y mucho más… Gracies Cruyff. Sempre estarem en deute amb tú.